Ilustración por Michelle Dersdepanian
El Observatorio de Equidad de Género contabilizó 43 feminicidios entre los meses de enero y julio de 2022, lo que refleja un aumento de siete casos en comparación con el mismo periodo en el año pasado.
Solo en julio, tres mujeres fueron asesinadas a manos de sus parejas o exparejas, y se suman a otros siete feminicidios íntimos registrados en este año. Los feminicidios íntimos son una subcategoría de feminicidios que describe la muerte de una mujer cometida por un hombre con quien la víctima tenía o había tenido una relación o vínculo íntimo, como esposo, exesposo, compañero, novio, exnovio o amante, persona con quien se procreó un niño o una niña.
Las diez mujeres víctimas de feminicidios íntimos en lo que va de año son Brenda Liz Pérez Bahamonde, Erika Marie Neris Díaz, Nancy Rosario Marín, Daisy Carrión Navarro, María Julia Febus Santiago, Adaly Santiago Ramos, Yomara Torres Garay, Vanessa Cardona Soto, Jennifer Maldonado Padua y Wilmarie Castro Díaz.
Junio y julio los meses más violentos
Durante junio y julio, ocurrieron 18 feminicidios. En cada uno de estos meses, hubo nueve feminicidios, lo que los posiciona como los más violentos del año, para las mujeres, hasta el momento.
“Si lo miramos con el informe del año pasado, estamos bastante por encima de lo que estaba el año pasado, a esta fecha. […] Las razones específicas de por qué ocurre el aumento son bien difíciles de determinar, pero las situaciones sociales que se están viviendo, definitivamente son un detonante”, sostuvo la analista del Observatorio de Equidad de Género, Debora Upegui Hernández.
Aparte de los 10 feminicidios íntimos, el Observatorio de Equidad de Género –que monitorea y analiza la violencia machista en Puerto Rico– registró otros 33 feminicidios. Entre ellos se incluyen 25 muertes de mujeres que permanecen bajo investigación de las autoridades o de los que no se tiene información. Además, se registró un feminicidio no íntimo o que fue perpetrado por un desconocido; y dos familiares, que son asesinatos a mujeres por alguna persona con la que tenían parentesco.
Asimismo, se sumaron cinco feminicidios indirectos, que incluyen cuatro por crimen organizado y uno por sobredosis. Los feminicidios indirectos son aquellos en que la muerte de la mujer no era el objetivo inicial de la violencia, pero que tiene la consecuencia de causar su muerte.
“Cuando estamos trabajando con los feminicidios indirectos, estamos apuntando a que son situaciones que se pueden atender con soluciones de política pública y que el gobierno es responsable, de cierta manera, por esas muertes, por no prevenir esas muertes”, explicó Upegui Hernández.
Igualmente, se contó la muerte de Shannel Colón Ponce como el único suicidio feminicida del año, lo que implica la privación de la vida luego de un abuso de poder crónico basado en el menosprecio de la condición de mujer o como consecuencia de la violencia de género. La joven, de 23 años, según la autopsia del Instituto de Ciencias Forenses, se quitó la vida cuando estaba recluida en el complejo correccional de Bayamón. La mujer había expresado, en televisión, que sus custodios la estaban maltratando.
Contabilizan 46 intentos de feminicidio
En el informe de julio, también se registraron 46 intentos de feminicidios. Para Upegui Hernández, este número es importante porque muestra que, de haberse completado estos atentados, la cantidad de feminicidios registrados se duplicaría.
El Observatorio también contó dos muertes de hombres vinculadas a feminicidios, una muerte de un hombre en un crimen de odio por homofobia y tres muertes violentas de hombres perpetradas por mujeres, en las que se aparenta que se dieron como legítima defensa a raíz de un patrón de violencia de género.
También, el documento reporta que 50 mujeres y niñas han sido reportadas desaparecidas en el 2022, de las que 34 aparecieron y 16 siguen sin ser ubicadas.
El Observatorio de Equidad de Género es una coalición no gubernamental, fundada en 2020, que realiza su contabilización de la violencia de género en Puerto Rico a partir del Modelo de Protocolo latinoamericano de investigación de las muertes violentas de mujeres por razones de género (femicidios/feminicidios).
“Nuestros números nunca van a ser iguales a los de la Policía. Nosotros tenemos ese espacio para manejar todas las violencias de género. […] También, a apuntar a espacios que se puedan trabajar con política pública, que se puedan hacer cambios”, subrayó Upegui Hernánez.