Miedo, terror, angustia, desesperación y ganas de sobrevivir son algunos sentimientos que experimentan quienes están en relaciones de violencia doméstica, una de las múltiples formas de violencia machista.
Miedo, terror, angustia, desesperación y ganas de sobrevivir son algunos sentimientos que experimentan quienes están en relaciones de violencia doméstica, una de las múltiples formas de violencia machista.