Las publicaciones de decenas de modelos puertorriqueñas denunciando en redes sociales por acoso sexual a un hombre que se identifica como fotógrafo y fashion stylist, que ha trabajado en eventos de moda y belleza en Puerto Rico, se han compartido cientos de veces entre ayer y hoy. Y, en ese compartir, otras siguen sumando sus experiencias con el mismo hombre bajo el hashtag #YoTambién y #NiUnaMás.
Las historias son similares. El hombre, que ha sido identificado por las denunciantes en redes sociales como “Michael Méndez”, presuntamente se hacía pasar por un profesional de la industria
ante adolescentes y jóvenes adultas que se iniciaban en el mundo de las pasarelas o tenían el interés en hacerlo para intentar convencerlas de que se mostraran desnudas ante él. Muchas dijeron que eran menores de edad, de 13, 14 o 15 años cuando recibieron los acercamientos.
La estrategia del sujeto, según han contado, era similar en cada intento. A veces, contactaba a las modelos por redes sociales y les pedía se mostraran en ropa interior a través de FaceTime para supuestamente identificar sus medidas. Otras, les ofrecía una sesión de fotos y les decía que debían posar desnudas. Este patrón constituye delito y es castigado por leyes estatales y federales.
“Nunca me atreví a hablar, pero él me obligó a hacer un shooting desnuda”, lee uno de los mensajes compartidos. “Me amenazaba que si no hacía esas cosas, no era nadie y hasta me llamó traidora por ser modelo de otra agencia”, lee uno de los mensajes compartidos.
Al hombre se le vincula con eventos como San Juan Moda y certámenes de belleza donde participan menores de edad, como Miss Puerto Rico Teen.
María Fernanda Ortiz, una modelo que ha participado en varias ediciones de San Juan Moda, y que es una de las que ha dado el paso al frente para denunciar la situación, habló con este medio y compartió su experiencia con el sujeto al que identificó como “Michael Méndez”.
“Yo conocí a este hombre (presuntamente Michael Méndez) cuando yo tenía 16 años en el evento San Juan Moda, que es uno de los más importantes de Puerto Rico y al que más personas asistan. Él se notaba como bien nervioso, pero siempre bien buena gente. Pero, también te tocaba innecesariamente. Trataba de ganar tu confianza y de ser tu amigo. Siempre me estuvo bien raro que él cambiara a cada rato de número de teléfono”, relató.
Contó que él ofrecía sesiones fotográficas a las modelos.
“Nosotras, jóvenes, comenzando, que nos hacen falta fotos para nuestro portfolio, avanzar en nuestra carrera de modelaje… Yo misma fui una que dije: “Wow! ¡Genial! ¡Me encantaría!”, narró.
Según dijo, según se acercaba la fecha pactada para la sesión, él escribía que habían cancelado el maquillista y el fotógrafo, pero que él podía tomar las fotos con su celular. Ortiz dudó, pero el plan continuó.
“Le dije: ‘¿puedo llevar a mi novio? Me sentiría mucho más segura’. Entonces, él ponía la excusa de que en el modelaje eso no era así, que yo tenía que ir aprendiendo porque ninguna de las modelos internacionales van acompañadas a los shootings. Que él me entendía, pero que yo lo tenía que entender a él”.
“En ese momento, yo tenía 19 años. Aunque era mayor de edad, aún no entendía muy bien la seriedad del asunto y picheo. Entonces, él me dice: ‘Deberíamos aprovechar para hacer fotos topless, bien Kate Moss. Te puedo poner unos accesorios. Te tienes que afeitar todo por si acaso nos queremos quitar más. Yo dije: ‘Hasta ahí. Yo no me siento cómoda haciendo esto’”.
Ortiz sabe de otras modelos que tuvieron experiencias similares cuando eran más jóvenes. Aseguró que se trata de un problema estructural en la industria, donde a las modelos no se les paga la mayoría de las veces y quedan a la merced de adultos que no sienten como responsabilidad principal salvaguardar el bienestar y la seguridad de las participantes, sino producir el evento de moda.
Patrón de acoso que se repite
Mirtea Nicole Díaz también compartió un relato parecido:
“Me reuní con él hace poco pensando que era para hacerme un shooting de high fashion o algo similar y él me vino con la labia de que él estaba buscando a la próxima Kim Kardashian, pero version latina. Me dijo que él no me visualizaba como modelo de high fashion y comenzó a enseñarme un montón de fotos y vídeos de mujeres desnudas diciendo que así es que yo debía de posar para triplicar mi cantidad de seguidores. Me preguntó múltiples veces que qué yo quería lograr y, cuando le decía mi meta real, me decía que eso ya lo habían hecho y que se me estaba acabando el tiempo. Seguía preguntándome qué yo iba a hacer y lo hacía con frecuencia. En una, me tocó la cara con sus dos manos y me dijo que yo era “chula”, y que tenía potencial, que él se iba en esos días a Santo Domingo y que tenía alto prestigio ahí, que a cada rato le dicen de allá para llevarse mujeres para trabajar. -Odio que me toquen, y más sin mi consentimiento, en el momento que él tuvo el atrevimiento de tocarme, me dio un asco tan grande que ya estaba loca por irme de ahí-. Aparte de que decía que lo que yo quería lograr, otras personas ya lo habían hecho. Comenzó a decirme que ya mi tiempo estaba pasando por tener 23 años y seguía con la presión de que él quería trabajar ya conmigo y que tenía mucho, pero mucho potencial. Cuando me iba a ir, me dijo que practicara en el baño a tirarme fotos flow como Kim y que se las enviara para que me fuera ayudando con mis poses, que subiera contenido diario a mis redes sola porque lo que estaba haciendo era ser una modelo que auspiciaba mercancía que no era mía. Me dijo que él podía conseguirme auspiciadores de gym y estética, y seguía intentando que le dijera que sí, y fue tanta su insistencia que para irme le dije que me comunicaría con él. Volvió a escribirme y yo le dije que su idea sonaba bien solo para que me dejara en paz, no le volví a contestar y me escribió una vez más hasta que vi este post y procedí a bloquearlo. Nunca, pero nunca me dio buena espina a nivel que yo le envié mi live location a mi mejor amiga con su información por si pasaba algo. Chicas, trust your gut, yo por querer darme la oportunidad de tener experiencias nuevas, me expuse estúpidamente a un peligro innecesario. Desde que yo vi su foto en WhatsApp, le comenté a mi mejor amiga que él me daba mala espina. Pero, quise ver si quizás me enseñaba a posar y me tiraba fotos high fashion como las que promociona en su página. Somos más de 30 mujeres y niñas que han pasado por una experiencia similar con este señor y siempre hace pushing para que uno vaya solo a estas cosas. Yo cometí ese error y jamás lo vuelvo a hacer. Si han pasado por esta experiencia con él o con cualquier otro, hablen”.
Jeannette Alicea también contó lo que a ella le pasó:
Tenía alrededor de 16 o 17 años cuando empecé a ser voluntaria en San Juan Moda y lo vi por primera vez. Después del Huracán María, me contactó para trabajar con él en el Choliseo con otras modelos, lo cual acepté y fui. Todo normal. Estaba haciendo mi trabajo junto a las otras modelos. Me mantenía aparte de él porque no lo conocía bien. Dieron la 1:00 p.m. y se me acercó y montó tema. Me habló demasiado. No recuerdo ni la mitad, pero para resumir, me vendió sueños. Me decía que me podía ayudar en el campo del modelaje, que yo soy muy hermosa, que siempre ha querido trabajar conmigo desde que yo era ujier en San Juan Moda, que quería hacer muchos shootings y por ahí seguía con la labia de “fotógrafo”. También me dijo que muchas modelos querían trabajar con él, pero que él les decía que no. Nunca me dijo por qué, pero que sí que estaba dispuesto a trabajar conmigo. Me preguntó si quería hacer un shooting con él en una playa de Piñones. Le dije que sí. Nos pusimos de acuerdo con la hora, la vestimenta y eso. Me pongo a pensar bien y muchas cosas no me cuadran. Cuando llego a mi casa, le digo a mami y papi (yo les digo todo) y pues estaban de acuerdo, pero a mami algo le estuvo raro. Me preguntó quién era ese fotógrafo y qué realmente quería conmigo. Le expliqué todo y pichó. Pero, al día siguiente no pude ir al supuesto shooting. Le escribí y le expliqué. Le dijo que estaba bien, que otro día. Pero, al yo mencionarle si podía ir acompañada o con mi madre, se puso bravo conmigo y a tratarme mal. Le ignoré las llamadas y textos por Whatsapp. Lo bloqueo. Me escribe por Facebook Messenger bien enfurecido diciendo que voy a perder oportunidades y cosas así.
Llamado viral a denunciar
Yuanilie Alvarado, modelo y exparticipante del certamen de belleza Miss Universe Puerto Rico 2018, fue quien lanzó en Instagram la alerta e invitó a otras jóvenes a denunciar bajo el hashtag #YoTambién.
“Si a ti a una persona te pide fotos denudas, fotos explícitas, que son unos nuevos conceptos… Ten mucho cuidado porque va a comenzar a decir que no vas a ser ninguna top model, que no vas a ser nadie en la industria; va a comenzar a amenazarte. Y eso es lo que él quiere hacer contigo para que tú lo hagas”, expuso Alvarado en un Instagram Story.
“Muchas chicas que están viendo este vídeo saben de quién estoy hablando porque lo vemos en cada evento al que vamos, en cada esquina, en cada lugar al que vamos a modelar, que vamos a hacer algún show y quiero que cada una sepa la realidad de esta persona. ¿Saben qué es lo más que me molesta? Que nosotras nos quejamos y él sigue estando ahí. Nosotras decimos lo que está sucediendo y él continúa estando en todos los eventos. ¿Qué más resta hacer? Ponerlo en las redes sociales”, señaló.
“Lo mismo le sucedió a otra chica que lo hizo viral en Twitter, publicando todos los screenshots, comentarios, mensajes, llamadas, todo lo que él le enviaba. Algo que yo no hice hace dos años cuando él me hizo lo mismo a mí, amenazándome por no haber hecho esas fotos”.
Alvarado se reservó el nombre de la persona, pues no está acusado formalmente ante las autoridades, pero en una breve conversación telefónica con este medio, indicó que se está asesorando legalmente.
En respuesta a las publicaciones de Alvarado, otras modelos han compartido sus historias o se han expresado en solidaridad.
San Juan Moda asegura que ha tomado medidas de seguridad
El presidente de San Juan Moda, Carlos Bermúdez, indicó que el individuo estuvo en ediciones de San Juan Moda en funciones de stylist como parte del equipo de diseñadores.
“No hubo una queja directa, pero sí comentarios extraños, y se determinó que no entrara más. Él no estuvo en la pasada edición. Se les indicó a los diseñadores que no podía entrar”, reaccionó a este medio al mencionar que es la primera vez que se enfrenta a una situación similar.
Aseguró que, antes de que se publicaran las experiencias de las modelos, en el evento se tomaron unos controles sobre la gente que llega al área de tras bastidores.
“Se les pidió a los diseñadores que sean féminas las personas que trabajaran con las modelos, porque esto llegó al evento a través de los diseñadores. Estamos procurando que los modelos hombres y las modelos mujeres estén aparte. También, que los vestidores estén separados del backstage”, comentó al añadir que no quiere los vestidores cerca del área de maquillaje, donde también hay gran concentración de personas.
Comentó, además, que las agencias y los diseñadores están informados de estos ajustes, sobre todo, el de las personas que ayudarán en la preparación de las modelos y modelos.
San Juan Moda hizo una publicación en su perfil de Facebook, en la que expresa “cero tolerancia” a la intimidación y al abuso de poder de personas relacionadas con el ambiente de la moda en Puerto Rico.
Por su parte, la diseñadora Sonia Santiago escribió, en su cuenta de Facebook, que colaboró con la persona que señalan las modelos, no obstante, no se percató de “algo sospechoso” en ese momento.
“Hace tres temporadas atrás, la persona envuelta en esta situación colaboró en calidad de voluntario, con esta servidora. Para ese entonces, no tenía conocimiento de conducta impropia alguna del joven imputado ni me percaté de algo sospechoso. Esta persona no ha vuelto a colaborar ni volverá en los próximos desfiles de Santiago Couture. Queden tranquilas nuestras modelos, sus padres, familiares, novios o esposos”, compartió en la red social.
Por su parte, el diseñador Harry Robles expresó su apoyo a todas las que han denunciado y escribió en Instagram que “este tipo de comportamiento nunca ha sido y tampoco será permitido en mis trabajos y desfiles”
*La periodista Amary Santiago Torres colabora en el desarrollo de este reportaje.
*Este reportaje será ampliado. Si tienes una experiencia que compartir, escríbenos por Facebook @Todas PR o por correo electrónico a todaspr@gmail.com.