La mayor parte del estudiantado del Recinto de Humacao de la Universidad de Puerto Rico (UPRH) desconoce los protocolos de atención al hostigamiento sexual, reveló la investigación Repensando la universidad como espacio seguro, que seis estudiantes del bachillerato en Ciencias Sociales con Investigación-Acción Social (INAS) presentaron el martes.
El proyecto educativo, requisito del curso Metodología de Acción Participativa, tenía el propósito de consignar la información que tienen los universitarios sobre las políticas institucionales e identificar sus necesidades. Fue un trabajo de las coinvestigadoras Crystal Caballero Colón, Dagnairé Rodríguez Sánchez, Karina Reyes Carrasquillo y Esmeralda Hernández Pérez, y la profesora Migna Rivera García.
Como parte de la exposición, se destacó que un 46.5% de los alumnos también tiene desconocimiento sobre el Reglamento General, un estatuto que establece normas, directrices, resoluciones de la institución. Como consecuencia, señalaron las investigadoras, no tienen una idea clara sobre sus derechos, informes, presupuesto universitario, entre otros asuntos.
“No deja de ser alarmante el hecho de que los estudiantes no conocen el reglamento. Asimismo, un 78% de los encuestados indicó que no tienen conocimiento acerca del protocolo a seguir en casos de manejo de violencia doméstica, agresión sexual y acecho”, resaltó Reyes Carrasquillo, durante la presentación, que se realizó por Zoom.
El estudio también reveló que un 76.5% de los estudiantes encuestados no conocen sobre la Política Institucional contra el Hostigamiento Sexual, contenida en la Certificación #130 (2014-2015). De igual manera, solo un 11% respondió que conoce sobre los procesos formales e informales que se deben llevar a cabo en casos de acoso sexual en el entorno universitario.
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Poco conocimiento sobre el programa de Título IX
Las investigadoras encontraron, además, que un 91.5% de los estudiantes subgraduados de la UPRH no tienen conocimiento sobre la política de Título IX, un programa federal que protege a los estudiantes y empleados de todo tipo de discriminación sexual.
Del mismo modo, se informó que la mayoría de los casos de hostigamiento sexual ocurren entre docente y estudiante, empleado a alumno y entre estudiantes.
“Reconocemos que con los resultados de este estudio se pueden proveer algunos caminos de acción con relación a la creación de proyectos o programas que puedan favorecer las conductas saludables dentro del recinto universitario”, expresó la profesora e investigadora Rivera García.
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Las denuncias de acoso sexual llegan a los medios
Las investigadoras destacaron que “el hostigamiento sexual es una realidad que se vive constantemente en las universidades públicas y privadas en Puerto Rico, y con el paso del tiempo, han ido en aumento”.
Expusieron, además, que en los medios de comunicación del país, todos los meses, se publica alguna información relacionada con el acoso dentro del contexto universitario, lo que demuestra el incremento en los de casos de agresión sexual.
Incluso, indicaron que, en febrero de 2019, el sistema educativo de la UPR dio a conocer que durante, el pasado año académico, se reportó un total de 73 quejas y 15 querellas sistémicas con relación al tema de acoso y hostigamiento sexual.
“Consideramos fundamental brindar esta mirada de salud integral como equipo de investigación. Queremos y proponemos repensar a la universidad como un espacio seguro para todas y todos, en el cual se promuevan iniciativas sobre el bienestar colectivo y la creación de una cultura saludable”, destacó Caballero Colón.
Los estudiantes que participaron del estudio también manifestaron preocupaciones sobre el estado en el que se encuentra la infraestructura de la institución, problemas con profesores, desconocimiento en los procesos administrativos, la accesibilidad y seguridad a los baños para personas no binarias, poca información sobre temas que comprenden a la comunidad LGBTTQ+ y limitado manejo de las emociones.
Las organizaciones comunitarias como un ente regulador
Por otro lado, se presentó el proyecto Sistematización de experiencias del proyecto Investigación-Acción Participativa (IAP), entre la universidad y la Asociación Recreativa y Educativa Comunal del Barrio Mariana (Arecma), que estuvo dirigido por la profesora Ivelisse Rivera Bonilla, junto a Kevin Cabrera Sierra, Lisamar Carrasquillo Ortiz, Juan Fuentes Hernández, Janzzel González Torres, Roselyn Pedroza Rodríguez, Natalia Vega Morales y Celimar Zayas Burgos, coinvestigadores.
Este proyecto colaborativo se basó en dos temáticas principales. La primera, el desarrollo de una investigación participativa en un contexto comunitario y, la segunda, los elementos fundamentales en la investigación-acción participativa en conjunto con el trabajo en equipo.
“Algo bueno que surge de este tipo de proyecto son las conexiones que se hacen. A lo largo de todo el proceso, te van transformando y crea toda una experiencia colectiva. La enseñanza más grande sobre el trabajo en equipo está en el fortalecimiento de las relaciones”, puntualizó Vega Morales.
“Estas presentaciones de avances en las investigaciones cuando son proyectos de conclusión son aún más emocionantes de las que hacemos regularmente porque recogen el trabajo y los frutos de años de preparación en la metodología de la investigación”, dijo la educadora Rivera Bonilla sobre las presentaciones.