¿Cuánto habríamos avanzado como sociedad si se hubiese implementado la perspectiva de género en los currículos educativos del país cuando primero se propuso?
Es una pregunta cuya respuesta solo se puede imaginar. La realidad es que, desde hace más de 10 años, diferentes administraciones gubernamentales han apostado por este marco de análisis para identificar y combatir las desigualdades en las escuelas públicas del país y hacer frente a la violencia machista. Grupos fundamentalistas y antiderechos, que actualmente encabezan desde la Legislatura la senadora Joanne Rodríguez Veve y la representante Lisie Burgos Muñiz, del Partido Proyecto Dignidad, han obstaculizado consistentemente este adelanto.