Fotos por Ana María Abruña Reyes
Sobre un centenar de feministas y personas aliadas ocuparon la avenida Universidad, en Río Piedras, este jueves, con un mensaje en común: defender el derecho que tienen las personas gestantes para decidir si continuar o terminar un embarazo, particularmente, ante el intento de la ultraderecha radical para reprimir y penalizar el aborto desde la legislatura.
Desde los micrófonos, Ruth Arroyo, de la campaña Aborto Libre, denominó a los políticos que criminalizan a las mujeres que deciden abortar como “retrógadas y voces fascistas”. Nada más este cuatrienio, se han presentado, al menos, seis proyectos de ley que pretenden restringir ese derecho reconocido constitucionalmente, según la jurisprudencia del Tribunal Supremo de Puerto Rico.
A espaldas de la portavoz, dos pañuelos gigantescos, color anaranjado y verde, colgaban de las escalinatas de Plaza Universitaria, para recordar la separación entre la Iglesia y el Estado, así como el derecho al aborto libre y sin juicios, respectivamente.
“No descansaremos hasta el más pleno acceso a la salud sexual y reproductiva”, pronunció la portavoz, a la vez que decenas de personas desplegaban un enorme abanico verde con el que hacían ruido, en sintonía con el reclamo.
La campaña por el Aborto Libre, Seguro y Accesible de Puerto Rico convocó la manifestación en el día por la despenalización del aborto en América Latina y el Caribe, conocido como 28S, para visibilizar que no existe el acceso real a terminar un embarazo en Puerto Rico, pues solamente cuatro clínicas hacen este procedimiento médico; los profesionales de salud que ofrecen este servicio han sido objeto de ataques y amenazas; y constantemente, se trata de avergonzar y criminalizar a quienes optan por esta alternativa.
De hecho, conmemoraron el evento escogiendo y leyendo 28 frases que calificaron como “indignas”, pronunciadas por políticos en contra de los derechos sexuales y reproductivos, tales como César Vázquez, Joanne Rodríguez Veve, Lisie Burgos, del Proyecto Dignidad; José Luis Dalmau, del Partido Popular Democrático; y Thomas Rivera Schatz, del Partido Nuevo Progresista.
Stephany Nieves resaltó, por ejemplo, la incongruencia de que se tilde a las mujeres que abortan de ser asesinas, pero esas mismas personas guarden silencio e ignoren los asesinatos de mujeres y personas gestantes que ocurren en la calle o en sus propios hogares.
Río Piedras: símbolo de luchas históricas
Arroyo contó que escogieron Río Piedras y la Universidad de Puerto Rico (UPR) como sede para la denuncia por ser “símbolo de luchas históricas donde se condena el discrimen y se invita al pensamiento crítico”.
Algunas universitarias se sintieron convocadas a participar de “las luchas (feministas) de este momento histórico”, tal como expresó Adriana Berríos, estudiante de Trabajo Social.
Miriam Toro, quien se crió y trabaja en Río Piedras, contó que acudió a la manifestación pensando en su hija de 6 años, para que nadie le prive de determinar, a futuro, lo que es más conveniente para su salud física y emocional. “Dentro de nuestros hogares, y como madres, no estamos dispuestas a ceder ese derecho ni por nosotras ni por nuestras hijas”, comentó.
La educadora sexual Yahira Reyes recordó que “todas tenemos que tener el derecho a la elección”, al tiempo que enfatizó que miles de mujeres mueren por complicaciones relacionadas con abortos inseguros. Según un informe de 2018 del Instituto Guttmacher, se trata de, al menos, 22,800 mujeres cada año.
La doula de aborto y educadora sexual, Karla Ferrer, llevaba amarrado a su vientre un pañuelo anaranjado que leía: “Embarazo infantil es tortura”.
En conversación con Todas, recordó que la niñez y adolescencia “son las poblaciones más expuestas al abuso sexual en este país”. Catalogó como inconcebible que se quiera “forzar a una niña a parir”.
Mientras tanto, las personas militantes de unas 19 organizaciones que integran la coalición marcharon y cantaron consignas como “Saquen sus doctrinas de nuestras vaginas”.
Algunas niñas y niños presentes corrían y aplaudían al son de la plena y consignas que se entonaban.
“No podemos olvidar que el aborto es un procedimiento de salud, un procedimiento que salva vidas, y todos estos ataques de la ultraderecha en Puerto Rico que intentan limitar estos derechos atentan directamente contra la vida de mujeres y personas gestantes”, pronunció Jomayra Pimentel, también portavoz de la coalición.
La actividad finalizó con un toque de plena compuesta por la cantautora Margarita Morales: “Este 28S queremos denunciar lo indigna que es esta gente que nos quieren dominar, predicar, silenciar, castigar, violentar. Este 28S, te venimo’ a recordar que el aborto es un derecho, no es asunto de moral. Y no vamos a dejar que lo penalicen”.