Convocados por el Comité Amplio para la Búsqueda de la Equidad (CABE), un grupo de personas colocó juguetes rotos frente al Capitolio, en San Juan, como símbolo del daño que provocan las “terapias” de conversión en menores y adolescentes.
En el marco de la conmemoración del Día Internacional contra las LGBTTIQ fobias, los manifestantes exigieron una sociedad más equitativa por medio de una instalación de peluches, carros y muñecas. Además, reclamaron la aprobación del Proyecto del Senado 184, que busca salvaguardar la salud física y mental de los menores de edad con la prohibición de las “terapias” de conversión.
“La primera intención [de la actividad] es conmemorar el Día Internacional contra las LGBTTIQ fobias, una fecha que no podemos dejar pasar, máxime cuando nuestros derechos han estado bajo ataques en estos últimos meses”, destacó Amárilis Pagán Jiménez, abogada y portavoz de CABE.
Cada 17 de mayo, cientos de personas conmemoran que la Asamblea General de la Organización Mundial de la Salud (OMS) eliminó la homosexualidad de la lista de enfermedades mentales. Durante este día, los ciudadanos y ciudadanas reconocen la violencia, el discrimen y el rechazo que sufre la comunidad LGBTTIQ+.
“La segunda intención de la actividad es poner en el centro de la discusión del Proyecto 184, de terapias de conversión, a nuestra niñez. Queremos que la gente pueda dejar a un lado cualquier prejuicio y sean capaces de ver que de lo que estamos hablando con [esta medida] es de garantizar el derecho a la integridad física y emocional de los niños y niñas de Puerto Rico, independientemente de su orientación sexual o género”, comentó la directora ejecutiva de Proyecto Matria.
Entre los mensajes que colgaron con los juguetes, se destacaron palabras de solidaridad y empatía. “Todos merecemos amor”, “eres importante, aunque no lo sabes” y “equidad” eran frases que acompañaban a los objetos.
Un proyecto vivo
El Proyecto del Senado 184 no obtuvo los votos necesarios para que la Comisión de Iniciativas Comunitarias, Salud Mental y Adicción rindiera un informe positivo sobre la pieza. Recibió ocho votos en contra y siete a favor.
El pleno del Senado podría debatir y llevar a votación el proyecto de ley si alguno de sus miembros solicita el “descargue” de la medida. Este mecanismo permite la consideración de una pieza legislativa, en el hemiciclo, sin el estudio previo o informe de una comisión.
“El proyecto sigue vivo porque no ha ido a votación y no ha sido derrotado en el hemiciclo, en una votación abierta de senadores y senadoras… Por eso, es que nosotras seguimos hablando del proyecto porque, aunque se creó la percepción pública de que se había muerto, no era así. Aún sigue vivo y puede ser aprobado”, detalló Pagán Jiménez, defensora de derechos humanos.
Experiencias que marcan
Frankie Goitía Beauchamp, quien cursa una maestría en Psicología, quiso participar del evento para adquirir nuevas experiencias y ampliar sus conocimientos.
“Más allá de tener un aprendizaje teórico, quiero llevarlo a la práctica desde un espacio donde se pueda hacer política pública y donde se realice un ejercicio social”, destacó Goitía Beauchamp, natural de Arecibo.
Añadió que, como sobreviviente de las “terapias” de conversión, ver los juguetes rotos fue impactante.
“Parte de lo que me motiva a estar aquí, es la experiencia que he tenido como persona y como persona queer. Soy una persona que ha tenido experiencias negativas porque vivimos en un sistema donde no se mantiene un respeto hacia todas la personas… Esto es parte de ponerle un stop y no dejar que el silencio tome el control de nuestras vidas”, puntualizó.