(Rosa Colón)
(Foto por Rafael Díaz Torres)
Por cuarto día consecutivo, cientos de puertorriqueñas y puertorriqueños se movilizaron a la calle para pedir la renuncia del gobernador Ricardo Rosselló.
(Foto de manifestantes a la espera de la llegada del gobernador el 11 de julio de 2019 por Mari Blanca Robles)
*Este reportaje es una publicación del Centro de Periodismo Investigativo. Puedes ver la publicación original aquí.
El gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló Nevares, y sus más cercanos colaboradores, sus “brothers” según los llama, realizaron trabajo político partidista en horas laborables y utilizando recursos públicos desde un chat de Telegram, donde el grupo orquestaba cómo manejar la narrativa política a través de las redes sociales y medios de comunicación del país.
(Foto suministrada por La Fortaleza)
El “Nuevo Gobierno” que prometió la administración de Ricardo Rosselló Nevares está lejos de ser una realidad. El Gobierno de Puerto Rico está retrasado en la implementación de gran parte de los cambios estructurales que buscan reducir el tamaño del aparato gubernamental, aumentar su “eficiencia” y generar ahorros recurrentes en el gasto público.
Si bien algunas de las medidas fueron promesas de campaña de Rosselló Nevares, otras han sido impuestas por la Junta de Control Fiscal, creada por la Ley PROMESA.