Pamela Rosado y Trinity San Antonio, de la Selección Nacional de Baloncesto de Puerto Rico. (Archivo de Ana María Abruña Reyes)
Han pasado casi tres décadas desde que en 1993, la exjugadora puertorriqueña María “Cusa” Rivera usó la plataforma del semanario Claridad para publicar una columna en la cual manifestó su frustración con relación a los múltiples obstáculos que tenían las mujeres que jugaban baloncesto en su época. Sus denuncias llegaron luego de años en los cuales la destacada canastera enfrentó discrimen por razón de su género y orientación sexual de parte de influyentes líderes del deporte puertorriqueño.