(María Delgado junto a su nieto. Foto por Esteban Morales Neris | Centro de Periodismo Investigativo)
*Reportaje publicado por el Centro de Periodismo Investigativo. Lee el original aquí.
Estar sentado en un pupitre. Mirar la pizarra, llena de números y palabras. Anotar la fecha en el lado superior derecho de la libreta. Mirar hacia al lado y saludar al compañero de clases.
Ahora, todo es diferente para miles de estudiantes que han pasado de ocupar los salones de clase a estudiar desde las casas de sus abuelos y observar desde una pantalla a sus maestros. El lápiz ahora es un teclado. Una mascarilla es parte de su uniforme, y el desinfectante de manos su escudo para proteger a sus cuidadores.