(Foto de archivo de Ana María Abruña Reyes)
Nunca había visitado una de estas clínicas. He ido a manifestaciones, he defendido su acceso y seguridad, pero nunca había tenido que pisar una. Recibo un mensaje días antes de una vieja amiga.
(Foto de archivo de Ana María Abruña Reyes)
Nunca había visitado una de estas clínicas. He ido a manifestaciones, he defendido su acceso y seguridad, pero nunca había tenido que pisar una. Recibo un mensaje días antes de una vieja amiga.
(Foto por Mari Blanca Robles)
Hace tres años, me fui de Puerto Rico con ganas de ver y comerme el mundo. Soñaba con hacer un impacto social, pero también tenía muchas preguntas, como ¿quién soy? y ¿quién quiero ser? En esta búsqueda de mí misma, me di muchos golpes, hice muchas loqueras y, en ocasiones, tomé decisiones muy impulsivas que, a lo largo, tendrían repercusiones que cambiarían mi vida para siempre.
(Arte de Stephanie Cavina para la campaña ¡Cambia ya!)
Había decidido que ya no me quedaría callada. Cargaba mi dignidad en el mentón, y mi mirada era desafiante e inquebrantable. Invencible. Estaba lista para recrear las batallas imaginarias que había practicado en mi cabeza; aquellas en donde enfrentaba a quien se atreviera atentar contra mi integridad. Con cada paso, erguía más mi espalda.
Pero, sabía que todo era una capa, que me vestía con la armadura del feminismo, la que me galardonaba un poco de valentía. Ya sabía que, en última instancia, tenía al alcance de mi mano mi taser y pepper spray, guardadas en un compartimiento de mi bulto. Ambas, me las había regalado mi padre cuando entré a la universidad. Eran como amuletos de protección.
En el canal Telemundo se presentó, el pasado 2 de mayo, un reportaje en el que ilustraron las dificultades que están enfrentando muchas madres solteras por las reglas de los negocios en el contexto de la pandemia.
Se reportó que hay 155, 335 padres solteros y madres solteras, en Puerto Rico, y que un 80% son mujeres. Según la demógrafa Judith Rodríguez Figueroa, “uno de cada tres hogares de familia es dirigido por una jefa mujer sin un cónyuge presente”.