Aborté por primera vez el 30 de diciembre de 2012. Llevaba 25 días con 18 años. Estaba en mi primer semestre de universidad y comenzaba formalmente mi primera relación amorosa, esa misma que nueve años más tarde entendí que estuvo llena de violencia de principio a fin.
No me hice una prueba de embarazo casera ni de sangre. Supe que estaba embarazada por la ausencia de mi menstruación y por varios síntomas que se presentaron. Siempre he sido curiosa, así que, con el internet al alcance de mis manos, hice una búsqueda bastante exhaustiva por varios días.