(Foto de archivo de Ana María Abruña Reyes)
“Cada día que pasa te extraño más. Ivonne Negrón Cintrón,
no hay nada que apague este dolor tan grande.
Siento cada vez más que este dolor se hace más fuerte.
Hay gente que dice: ‘Es cuestión de tiempo’… pues el mío no llega.
Creo que solo la muerte me podrá quitar tanto dolor, ya que por más
que trato, no lo logro. Solo me consuela saber que estás mejor que yo,
porque ya no sufres ni padeces y sé que, desde el cielo, nos estás cuidado.
Descansa en paz, mi querida y amada Ivonne Negrón Cintrón”.
Lula Cintrón
15 de noviembre de 2019
Las palabras del epígrafe expresan el sufrimiento de una madre ante la pérdida de una hija. A ella, el tiempo no le ha traído consuelo, su dolor es continuo. Solo puede doler tanto lo que mucho se ha amado; y cuando se trata de una muerte violenta, duele más. Y duele aún más cuando, en busca de la justicia, los procesos añaden la revictimización.