(Foto principal: Facebook Women’s March
Fotos insertadas en el texto: Alexandra Márquez)
Washington D. C. — A las 10:00 de la mañana, la multitud salía de la estación del tren por docenas. A nadie parecía importarle el frío de 30-grados. La mayoría eran jóvenes y portaban un sombrero rosado con dos picos simulando las orejas de los gatos, prenda característica de la Marcha de las Mujeres —una protesta mundial cuya gestación fue una respuesta directa a la elección de Donald Trump y rápidamente se convirtió en una de las protestas más grandes en la historia de los Estados Unidos.